IU Madrid apoya la huelga de la plantilla de Musashi

La empresa japonesa quiere llevar a cabo un ERE que afectaría al 30% de la plantilla.

Hoy, miércoles 26 de octubre comienza la huelga convocada por el comité de empresa de la fábrica de Musashi en Collado Villalba. El desencadenante de esta huelga es la propuesta de la empresa de llevar a cabo un Expediente de Regulación de Empleo (ERE) que afectaría al 30% de la plantilla. Es decir, de los 155 trabajadores y trabajadoras, la patronal quiere despedir a 55. Además, la propuesta comprende una rebaja salarial entre un 26 y un 34% para el resto de los empleados.

Izquierda Unida Madrid ha mostrado su apoyo a las y los trabajadores de la planta en la huelga en protesta por este ERE, que podría suponer el primer paso para el cierre de la planta. Hasta las puertas de la fábrica se ha acercado el responsable de Organización de IU Madrid, Fernando Jiménez, junto a las compañeras de la asamblea de IU Collado Villalba.

Esta fábrica metalúrgica del sector de componentes para el automóvil ha sido un referente en el noroeste de Madrid. De hecho, parte del desarrollo económico y social de Collado Villalba se debe a la puesta en marcha de esta fábrica en 1940, entonces bajo el nombre «MADE».

La planta lleva décadas sufriendo una desinversión importante. Sus sucesivos equipos de dirección se han mostrado incapaces de presentar un plan adecuado para adaptar la metalurgia por estampación al sector del coche eléctrico y así garantizar la viabilidad de esta instalación.

El «plan de viabilidad» presentado ahora para adaptarse al mercado actual pasa por el ERE planteado. Pero también por subcontratar parte de la producción o bajar los salarios del resto de la plantilla.

Ante esta situación, se ha planteado un calendario de movilizaciones que, desde IU Madrid apoyaremos y difundiremos, entre ellos una concentración frente a la embajada de Japón el próximo miércoles 2 de noviembre.

IU Madrid pide que se cumpla el convenio colectivo aprobado en junio de este año y que la empresa desista de este ERE que será muy perjudicial, tanto para los que pierden su empleo, como para los que se quedan con la misma carga de trabajo a llevar a cabo con un personal considerablemente reducido. Esta estrategia ya conocida puede servir como excusa para una futura deslocalización de la planta.